La familia más conocida de Springfield vive ajena a la vorágine de este deporte, aunque empieza a interesarse en él
El fútbol (soccer, para los americanos) es un deporte que ahora empieza a penetrar con firmeza en Estados Unidos, con una creciente profesionalización y grandes inversiones para atraer talento y calidad. Pero eso no era así hasta hace poco, y esa realidad se refleja a la perfección en Los Simpson, la serie que gira en torno a la familia más conocida de Springfield y que apenas hace referencia al balompié en toda su historia. No obstante, hay algunas excepciones, pocas, que merece la pena recuperar.
Una de ellas es en el episodio 5 de la temporada 9 (09×05), La familia Cartridge en su versión española. En él aparece Pelé de forma breve antes de un México-Portugal anunciando un producto en el centro del campo y llevándose a cambio un saco lleno de dólares, en una clara crítica al negocio balompédico. El partido entre mexicanos y portugueses, por cierto, termina con violencia en las gradas y en las calles, pero no por las pasiones que despierta, sino por aburrimiento…
Ronaldo, caliente que sales
Otro ejemplo es el capítulo Marge virtual (18×22), en el que participa Ronaldo con la camiseta del Real Madrid. Actúa, en cierto modo, como la voz de la conciencia de Homer, que se ve obligado a expulsar a su hija Lisa de un encuentro por conducta antideportiva tras haber hecho la vista gorda en jugadas anteriores. Y este episodio entronca con No tienes que vivir como un árbitro (25×16), en el que Lisa hace referencia a ese pasaje en un bonito discurso escolar dedicado a su padre y que se vuelve viral. Tras ello, un emisario de la FIFA, organización salpicada por la corrupción, le pide a Homer que sea uno de los árbitros del Mundial de Brasil, dado que su integridad es lo que necesita el fútbol. De hecho, debe enfrentarse a muchos sobornos para que el país anfitrión gane la Copa del Mundo con trampas, como simulaciones (¿se refiere a Neymar?), pero se mantiene firme, aunque a punto está de costarle la vida. Alemania sale campeona.
Por lo que respecta a la estética, cuando Homer Simpson ejerce de árbitro va vestido como un colegiado de la NFL, con camiseta a rayas blancas y negras. Por su parte, los futbolistas que dibuja Matt Groening carecen de cualquier distintivo, más allá de los colores de los equipos, que siempre son selecciones nacionales. En los últimos guiños balompédicos, añade los dorsales, pero en ningún caso los nombres en los uniformes.
Acuerdos estratégicos
Más allá de lo puramente televisivo, los Simpson y el fútbol poco a poco van acercando caminos. Por ejemplo, Cristiano Ronaldo, convertido en ciudadano de Springfield, visita a Homer Simpson y le hace un caño en un anuncio de Nike. Asimismo, la productora de la serie, Twentieth Century Fox, se asoció con algunos clubes con motivo del 25 aniversario de la serie y para promocionar el Mundial de Brasil 2014. Los elegidos fueron el Barcelona, el Zenit y el Boca Juniors. Más reciente es la felicitación de la familia amarilla a la selección femenina de EEUU con motivo de la conquista de su cuarto Mundial. En la estampa no faltan Megan Rapinoe ni Alex Morgan, entre otras integrantes del equipo.
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